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empresa, para abrir cuentas en los ban- cos, para acceder a los créditos, etc. Pero no fue hasta el año 1971 cuando Aseme se constituye legalmente como organización empresarial, ya que se atravesaron muchas dificultades hasta la aprobación de los estatutos. En la Ad- ministración pensaron que se trataba de una asociación con matiz político, de ca- rácter feminista, por lo que tuvieron que esperar a 1971 para celebrar la primera Asamblea, que estuvo formada por die- cinueve mujeres, con diez vocales. Ase- me formaba parte de la organización sindical. Poco después, nació la Confe- deración Española de Mujeres Empresa- rias (CEME), de ámbito nacional. El avance vino en el año 1975, el “Año de la Mujer”, porque fue cuando se am- plío la libertad de acción de la mujer, al suprimirse la licencia marital. Aunque siguió persistiendo la colación al marido en cuanto a la facultad de administra- ción y endeudamiento de los bienes co- munes. Pero fue muy importante para las empresarias la ley que otorgaba la facultad de abrir cuentas en bancos sin la autorización del marido. Y si hacemos cuentas, solo han pasado 46 años desde el Año de la Mujer, por lo que a pesar de ser necesarios todavía muchos cambios, no hemos de olvidar los logros que se han conseguido. ¿Cómo ha evolucionado, en grandes líneas, el movimiento empresarial fe- menino en nuestro país? La evolución ha sido muy positiva y diversa, desde 1977, año de la Ley de la Libertad Sindical, destacando que gracias a las nuevas tecnologías y a la globalización en general, las sinergias entre las asociaciones empresariales de mujeres han ido en aumento. Ocurre como en todos los sectores, han existido épocas de distanciamiento y competencia pero a día de hoy, en tér- minos generales, las asociaciones em- presariales de mujeres se están unien- do para trabajar juntas por la plena incorporación de la mujer al mercado laboral, se está asumiendo la respon- sabilidad de estar en puestos de toma de decisiones en nombre del empresa- riado femenino y reivindicando el papel de las empresarias en el crecimiento y desarrollo de la sociedad. Se habla mucho del techo de cristal, o incluso de cemento. ¿Existe realmente? El techo de cristal y el de cemento exis- ten, como mínimo en todos los estudios que se han dedicado a ello. A FONREDVISTOA TESLA Me preocupa el techo de cemento, ya seas empresaria o trabajes por cuenta ajena. Porque es un techo que te autoimpones innecesariamente, cuestionándote tus capacidades para estar al frente o asumir un proyecto No me preocupa el techo de cristal, por- que siempre he defendido que el cristal se rompe. De hecho, en el sector em- presarial, cuando la mujer está al fren- te de su negocio ese techo no existe, y cuando la mujer trabaja por cuenta aje- na, es cierto que, por temas de educa- ción, costumbres, falta de conciliación y corresponsabilidad sí existe, cada día menos pero no lo voy a negar. Me preocupa más el techo de cemento, ya seas empresaria o trabajes por cuen- ta ajena. Porque es un techo que te autoimpones innecesariamente, cues- tionándote tus capacidades para estar al frente o asumir un proyecto. Y este sí que hay que romperlo, porque nadie lo va a romper por nosotras. ¿Cómo se plantea la mujer de hoy el emprendimiento? Tras la crisis del 2008 la mujer se plan- teaba el emprendimiento como una ne- cesidad, en la mayoría de los casos para poder volver a incorporarse al mercado laboral. Lo cierto es que ese emprendimiento femenino empezó a estar en auge y surgieron muchos referentes de muje- res empresarias, que han sido ejemplo para otras, y esto ha motivado que ac- tualmente se contemple como una op- ción para poder desarrollar tu proyecto, Muy personal incorporarte al mercado laboral, y ob- tener unos beneficios sin depender de un contrato. El Informe GEM indica que la diferencia entre la Tasa de Emprendimiento Tem- prano masculino y femenino en 2019 es la más baja de toda la serie histórica, el 6,3 y el 6,0 %. ¿Está demostrando la mujer un ma- yor impulso al emprendimiento en los últimos años? Es cierto que, dentro del campo del emprendimiento, apenas hay brecha de género, más cierto que en el sector em- presarial ambos géneros asumen igua- les retos y responsabilidades, y como confirma el Informe GEM, la mujer es la opción que más está adoptando. ¿Qué consecuencias está teniendo en el trabajo femenino la crisis eco- nómica generada como consecuencia de la crisis sanitaria producida por la COVID-19? Esta es la otra cara de la moneda, que dentro del sector empresarial y en la so- ciedad no teníamos prevista, una pan- demia que está creando tanta incerti- dumbre todos los niveles. Es cierto que a nivel corresponsabilidad, ha afectado más a las mujeres, porque tenemos que negociar en nuestra esfe- ra personal el reparto de tareas en el cuidado de menores y/o dependientes al 50%, cosa que no acostumbramos El libro que está leyendo: Las siete llaves: Conquista tu libertad vital El mejor momento de la semana: Los lunes Un deporte: Patinar Un propósito personal para 2021: Mejorar, crecer personal y profesionalmente y disfrutar del ahora. INVIERNO 2020 • tesla 19